google-site-verification: google46388f1eb819cd28.html Todo es uno: desierto
Mostrando entradas con la etiqueta desierto. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta desierto. Mostrar todas las entradas

viernes, 26 de octubre de 2018

Soledades

Transito este congelado desierto que encadenan las centurias
donde a veces    /solo a veces/
    salta el chisporroteo de la luz intensa del alma
        /del líder que crucifican/
            ...que enmaderan/
    las siempre arrepentidas edades del barro.

Y portero de nubes soy...
Estas nubes que confluyen
    en el espacio de mis sombras.
Estas sombras que dibujan al hombre
    en su andar de esqueleto petrificado...
Esqueleto que cae al leve roce
    de esa hoja de otoño que sesga impávida
        la nevada sien de mi canción.

A pesar de la memoria canto/
    porque bebo el agua dulce de tus ojos/
Tus ojos que encarnan
    el fotón energizado de mis sueños/
        mi esperanza.

Es por eso que vivo.
Es por eso que anhelo tus manos
    para barrer de luz con tu amor/
        estos horizontes oscuros.

Navego este río abrazado a tu cintura/
y me haces ver/
los peñascos alados de verde
    en aquella ribera.
Litoraleña herencia me deja fluir
    manso o bravío    en este torrente.

¡Es a luz lenta que se construye la noche!
    en esta carpa rudimentaria/    convaleciente templo/
anegado santuario de esta colectiva conciencia
    desatinada y torpe del mundo.

¿Aguerrido me ves?
    ...comprende que es por tu corazón
        que es fuerte el mío/
...y si hay gloria en mi frente
    fue de tus manos
        que ha brotado el laurel.

¡Oh , cuánto ganaría el mundo
    si le hiciéramos perder
        sus profundas soledades!
Dame tus brazos entonces
    para marchar
        entre esta confusa contienda/
   y en este celo y deseo
        otros tal vez
            se unirán.

Autor: Juan Carlos Luis Rojas

https://todo-es-uno.blogspot.com/search?q=soledad

lunes, 1 de mayo de 2017

Terraplén desierto

Cruzando ya
la noche
del regreso,
caminando,
mientras la luna,
centinela amada,
canta en su fragor de silencios
aventuras andadas en los tiempos...
cantadas en el día de la vida...
muriendo en la vida de mis sueños
hasta el silente final...
que no es fin,
sino otros comienzos,
en el hervor de la hojas
en el fervor pasional de los ríos
o en el útil tugurio del humus.

...Sé  que antes del último suspiro
arrastrando glorias mis huesos
sobre el verde erial del césped
plantará  allí
sobre aquel
terraplén desierto
la ultima flor,
roja flor...
flor roja
desprendida luz
de mi pecho abierto.

Auror: Juan C. L. Rojas